Jasmín Urzúa y Amanda Sepúlveda han debido soportar múltiples prácticas homofóbicas por parte de sus empleadores. Sin embargo, esta situación se salió de control cuando una de ellas, Jasmín fue desvinculada de su puesto sin más razones que la clásica «necesidades de la empresa», junto a otros dos funcionarios de orientación no heterosexual.

Según explicó Jasmin al medio El Desconcierto, todo comenzó cuando ella llegó a trabajar a una de las sucursales de la multitienda Hites de Concepción, en noviembre del año 2016. Todo funcionaba bien, tanto, que incluso recibía constantes felicitaciones por su desempeño en las ventas.

Amanda llegó a la misma tienda en mayo de 2017. Nadie la capacitó ni la orientó con respecto a sus funciones, por lo tanto, Jasmín la ayudó. Luego de eso, ambas iniciaron una relación sentimental.

De acuerdo al relato, el día 13 de junio comenzaron los problemas. La pareja asistió al funeral del hijo de uno de sus colegas. Ahí también llegaron otros trabajadores y directivos. Al verse muy sensibilizadas por el tema, ya que ambas son madres, se retiraron antes del fin de la ceremonia.

Al salir del cementerio se encontraron con el gerente general de la tienda, Alejandro Cuevas, la jefa supervisora, Yasna Seguel y el jefe de recursos humanos, Rodrigo Escobar. Ellos las vieron tomadas de las manos. Posteriormente, los dos primeros serían quienes ejercerían actos de discriminación y acoso.

Jasmín Urzúa aclara que uno de los primeros actos homófobos hacia ellas fue cuando les prohibieron salir juntas a break. «La jefa (Yasna) nos decía que éramos siamesas, que éramos un bloque y que nos iba a mandar a doblar calzones. Que no sabía cómo separarnos».

«A Amanda la cambiaba al primer piso a ver teléfonos, a mi dejaba arriba en el quinto piso, la idea era que no nos topáramos. El gerente general trató de cambiarle muchas veces los turnos definidos a Amanda, que trabajara de mañana y yo de tarde, siendo que ambas trabajábamos en el mismo turno», agregó Jasmín.

Como era de esperar, Jasmín no denunció los hechos por temor a ser despedida, ya que en sus propias palabras, si ella deunciaba, sería catalogada de problemática y posteriormente despedida, como suele suceder en el sistema laboral chileno. Sin embargo, recurrió a su sindicato.

En marzo de 2018 hubo un período de despidos masivos. Jasmín Urzúa aclaró que el gerente hizo una reunión y dijo que no habrían más despidos. El 26 de abril, Jasmín fue despedida, junto a dos personas más con una orientación no heterosexual.

Urzúa indicó que habían varias parejas heterosexuales que nunca tuvieron ningún problema en la tienda, por lo tanto, la discriminación era claramente homofóbica. Y que su despido fue injustificado, ya que nunca falló en el ámbito laboral. Urzúa declaró en la Inspección del Trabajo, y dicha institución falló a su favor, e inició un proceso contra Hites amparada en la ley Zamudio.

El testimonio de la vicepresidenta de la Confederación Nacional de Comercio e integrante del Sindicato de Hites, Valeska Reinoso, es muy importante para la denuncia, ya que ella presenció actos lesbófobos contra la pareja. A fines del año 2018, Seguel le solicitó a Reinoso que interviniera para separar a las trabajadoras. Reinoso respondió «¿acaso usted no está en conocimiento de que ellas son pareja?. Eso no debe ser de su interés como dirigenta y tampoco debe serlo para ella como jefa, pues debería evaluar a su personal en base a sus capacidades y competencias».

Jasmín declaró que Amanda debe seguir soportando el hostigamiento y el desmedro de sus superiores, ya que la rebajaron para que trabajara en un piso inferior, con un sueldo notablemente menor.
La primera audiencia quedó sin efecto. La próxima está fijada para el día 5 de junio del presente año.